Citgo. Esta derecha está descubierta. Escogió el rol de ser una fuerza de ocupación interna, menos interesada en la democracia que en asaltar el poder como sea, solo que no ha tenido con qué. Tanta impunidad está a punto de zozobrar. Tiene al frente a un pueblo esperanzado que quiere paz, se cansó del conflicto y quiere avanzar hacia una economía que supere las limitaciones.
Con miras a la confrontación electoral del 28J, el balance que se puede hacer de la oposición derechista la deja mal librada. No tiene manera de tapar inconsecuencias, miserias, decisiones y actuaciones antivenezolanas.
Ha protagonizado el peor juego posible. Ha respaldado abiertamente las medidas criminales de bloqueo contra Venezuela. En 2014 y 2017, promovió la desestabilización social y política, aplicando una supuesta revolución de colores que se tradujo en acciones guarimberas violentas y dejaron un saldo de muertos y heridos. En 2019, lanzó a los cuatro vientos un supuesto «gobierno interino», con Juan Guaidó como cabeza visible, siguiendo la política de «cambio de régimen» de Estados Unidos. Intentó en 2020 una invasión marítima, con el nombre de Gedeón, que vino desde Colombia, con mercenarios extranjeros y algunos desertores de la Fuerza Armada.
Para leer un análisis del autor sobre las elecciones 2024 en Venezuela
Un traspié tras otro. Una sucesión de eventos marcados por el desprecio al debate democrático, que han dejado heridas en la economía y la vida del país, y en la de cada quien.
Tanta maldad y tantos errores tienen un costo político y electoral para quienes han golpeado a Venezuela, han impedido que lleguen medicamentos y alimentos y pretenden minimizar y hasta dejar de lado el grave daño ocasionado a los derechos humanos del pueblo venezolano, por más de 950 sanciones criminales impuestas.
Una fuerza de ocupación interna
Es una oposición que escogió el extraño rol de ser una fuerza de ocupación interna, asesorada y financiada desde Estados Unidos y a veces por fuentes europeas. Menos interesada en la democracia que en asaltar el poder como sea. Cuando ha podido avanzar como fuerza opositora, como en 2015 al ganar las elecciones de diputados, de inmediato viró hacia el atajo de suponer que podía llegar al poder de manera inmediata, desconociendo la razón, la Constitución y el deber ser.
Cuando en febrero se difundieron imágenes de la destrucción del avión de Emtrasur, nave venezolana que fue retenida ilegalmente por dos años en Argentina, y finalmente llevada por la fuerza a Estados Unidos, esa oposición de derecha avaló con silencio cómplice esa actuación.
Para leer noticia sobre el caso del avión de Emtrasur:
Siempre ha respaldado las políticas de fuerza, arbitrarias y unilaterales puestas en marcha por Estados Unidos para causar daño a Venezuela y desestabilizarla. Por supuesto, es lo que hace con el robo de Citgo en desarrollo.
El complot contra Citgo
Lo de Citgo es un caso emblemático. Debería unir a todos y todas, como cuando juega la selección vinotinto de fútbol y genera emociones y pasiones.
Sobre esta empresa se mantiene la disputa legal. El 3 julio, el Segundo Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos anuló un fallo que había sido favorable para los accionistas de los bonos de Citgo. Según la agencia EFE, en su fallo, el tribunal descartó la decisión de la jueza Katherine Polk Failla, quien en 2020 dictó en favor de los tenedores de bonos de Petróleos de Venezuela y autorizó embargar a su filial Citgo.
El presidente #NicolasMaduro recordó a #EEUU que #Venezuela es libre y soberana, por tanto, rechaza cualquier condición imperial y exige el fin de las #sanciones
Además, cuestionó las condiciones del Gobierno estadounidense en la venta de gas licuado a Venezuela,… pic.twitter.com/QGsbgHM03t
— HispanTV (@Nexo_Latino) July 11, 2023
Esta es una empresa venezolana, instalada en territorio estadounidense, que tiene tres refinerías, con capacidad de procesar 807 mil barriles por día, 38 terminales, 6 oleoductos y 4200 estaciones de servicios. Sus instalaciones tienen una valoración aproximada de 12 a 13 mil millones de dólares.
Según fuentes de PDVSA, Estados Unidos se ha saltado su propio ordenamiento legal y lo fijado por la Organización Mundial del Comercio, con el nítido interés de arrebatarle esta empresa a Venezuela.
Un conflicto entre Crystallex y el Estado venezolano, después que esa empresa fuera nacionalizada, se utilizó para que un juez dijera que el control accionario de PDVSA sobre Citgo la convertía en “un alter ego de la República”, y por tanto procedía el reclamo de Crystallex, de quedarse con la refinadora y petrolera venezolana. La verdad verdadera es que el reclamo es a la República Bolivariana de Venezuela –al Estado- y no a PDVSA ni Citgo.
En las acciones contra Citgo aparece la derecha. Un abogado de Crystallex, José Ignacio Hernández, fue nombrado procurador, en el llamado interinato de Guaidó. Cualquiera revisa lo sucedido y no encuentra ni un gesto en favor de los intereses nacionales. Todo lo hicieron para crear un cerco y favorecer el efecto perverso de las sanciones criminales.
Para leer más sobre José Ignacio Hernández:
Hay que dar relevancia al dato de que por las sanciones unilaterales, Venezuela estaba impedida de cumplir cualquier tipo de pago. La jugada se fue configurando para que se legitimara el robo de Citgo. Les salió bien pero no tan bien. La trampa sale a relucir. La política exterior gringa queda al desnudo. No tienen límites en su afán de causar daño a Venezuela, país al que ha etiquetado como “una amenaza inusual y extraordinaria”.
Con esperanza y voluntad de cambio
Hasta ahora, los designios imperiales no han podido con la resistencia y la voluntad de cambio del pueblo venezolano. Se cumple el veredicto de Antonio Gramsci: pesimismo de la razón, optimismo de la voluntad.
#Gramsci pic.twitter.com/4QA0y9muJU
— Israel López Marín (@IsraelLpezMarn1) June 1, 2024
En medio de muchas dificultades y el acoso de las sanciones criminales Venezuela ha querido y ha sabido vivir y superarse. Este 28J esa fuerza se mostrará. Con orgullo patrio y soberano. Con la valentía y la rebeldía que sabemos.
A las campañas de miedo, se les responde con la esperanza de sembrar y cosechar paz y más democracia y ciudadanía. Hay tres claves que ponderar y apreciar en esta Venezuela de 2024.
La primera, la decisión de mantener el clima de paz, lo cual requiere del rechazo de las agendas violentas y derrotar las amenazas internas y las que vienen del hegemón estadounidense. La segunda, avanzar hacia una economía que supere el rentismo petrolero y minero, que nos hizo dependientes de los ingresos de las fuentes energéticas. Se impuso un capitalismo depredador que en palabras de Uslar Pietri, incorporó nuestra vida al petróleo, y no al revés… el petróleo a nuestra vida. La tercera, como consecuencia de lo anterior, la recuperación del poder del salario, de la salud pública y de las escuelas, liceos y universidades públicas.
A veces el tiempo tarda pero llega la hora de hacerse valer y de rechazar a quienes quieren convertir la patria venezolana en vulgar colonia. Esta es la hora y el momento.