El líder norcoreano muestra músculo a EE.UU., al afirmar que cuenta con “capacidades militares para disuadir” a Washington de entrar en conflicto con Pyongyang.
“En la actualidad, nuestras Fuerzas Armadas cuentan con capacidades militares realistas que podrían disuadir a Estados Unidos de intervenir militarmente en caso de un escenario en la península coreana”, manifestó el martes Kim Jong-un durante su visita a la Academia de Ciencias de Defensa Nacional, haciendo referencia a un eventual conflicto con Corea del Sur.
Desafió además a Seúl, asegurando que las tropas norcoreanas también “tienen la capacidad abrumadora de desbaratar las capacidades ofensivas básicas, la infraestructura y los sistemas de mando y control del Ejército de Corea del Sur” en las primeras fases de una eventual guerra.
Urgió la necesidad de continuar con “el avance de la revolución industrial de defensa” en el país frente a los constantes “esfuerzos del imperialismo estadounidense y sus compinches por usurpar” la soberanía del Norte.
Denunció las acciones provocativas de EE.UU. y sus aliados, incluidos los ejercicios militares cerca de las fronteras de Corea del Norte, “el repetido espionaje aéreo diario y la introducción de medios estratégicos estadounidenses en la península coreana”, y advirtió que estas medidas son la causa de las tensiones militares en la región.
Kim avisa: Seúl “jugó con fuego” con su peligroso ejercicio aéreo
Kim fustigó a Seúl por realizar el lunes un ejercicio aéreo, que incluía alrededor de 20 cazas, cerca de la frontera con Corea del Norte, horas después de que Pyongyang informara a Japón de un plan de lanzar un satélite para el 4 de junio.
Tachó la demostración de fuerza de Corea del Sur de una “provocación muy peligrosa” y un “juego con fuego” y prometió acciones “abrumadoramente severas” contra ella, según la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA, según sus siglas en inglés).
El líder norcoreano defendió la posesión de un satélite de vigilancia como una opción “inevitable” para proteger su soberanía, después de que fallara el lunes un intento del país de colocar un satélite de vigilancia en el espacio. El cohete portador del satélite Malligyong-1-1 explotó durante el vuelo de la primera fase, poco después del despegue, según KCNA.
Corea del Norte puso en órbita con éxito su satélite de vigilancia Malligyong-1 en noviembre pasado después de un par de intentos fallidos a principios de año. Las autoridades norcoreanas han asegurado que el país está en camino a convertirse en “potencia espacial”.